Si estás leyendo este artículo, probablemente se deba a que en varias oportunidades te has encontrado tan enfocado en el trabajo que tu vida personal se ve afectada. Esto se debe a que has cometido el error de generar un desbalance entre ambos.

A pesar de que mantener un equilibrio entre estas dos partes de la vida puede ser un reto, es importante recordar cuán esencial es ya que nos permite tener menos estrés, disminuye de riesgo de burnout laboral y genera un mayor sentido de bienestar.

En resumen, mantener un equilibrio entre el trabajo y la vida personal se trata de la priorización entre la carrera profesional y el bienestar, los cuales muchas veces se ven afectadas por un incremento en las responsabilidades del trabajo, más horas laborales, aumento de responsabilidades en el hogar o incluso tener hijos.

Hoy te comparto algunos tips útiles para generar un balance entre tu trabajo y tu vida personal:

1. Acepta que no hay un balance perfecto 

El primer paso es aceptar que si bien tener un equilibrio perfecto suena excelente, muchas veces no será posible debido a que existen responsabilidades y tareas que debemos llevar a cabo.

No persigas el calendario perfecto, ya que algunos días tendrás que enfocarte más en el trabajo, y quizás otros tendrás la oportunidad de disfrutar más tiempo haciendo cosas que te gustan o compartiendo con tu familia.

Lo importante para esto, es establecer límites que estén afectando que tu tiempo esté destinado más a una u otra faceta de tu vida.

2. Encuentra un trabajo que te apasione

Si me has leído antes, sabrás que encontrar tu pasión es clave para ser exitoso y además, es esta la que te moverá a perseguir cualquier objetivo en la vida.

Ese dicho que habla de que cuando tienes un trabajo que amas nunca estarás trabajando es muy cierto, porque solo cuando realmente disfrutas las actividades que haces, el tiempo pasará rápido y podrás sentir un equilibrio que maximice tu bienestar.

3. Prioriza tu salud

Tu salud física, emocional y mental deben ser una prioridad. Si sufres de ansiedad o depresión es necesario que busques ayuda de expertos y que crees tiempo en tu agenda para atender esta necesidad.

De igual manera, si te enfermas no postergues acudir al doctor. Haz espacio y prioriza tu salud, porque solo cuando la tenemos somos capaces de sentirnos felices con nosotros mismos y nuestra situación actual.

4. Deconéctate de vez en cuando 

Al estar tan expuestos a la comunicación digital, nos vemos muchas veces forzados a conectarnos constantemente con lo que sucede en el mundo o con nuestros conocidos, y esto muchas veces genera una presión mayor que incluso nos aleja de nuestra realidad personal.

Desconéctate de las redes sociales, toma unas vacaciones, no tengas miedo. Hacerlo de vez en cuando sin duda ayudará a tu salud mental y disminuirá el estrés.

5. Haz un RPM

Esta es una técnica que aprendí de Tony Robbins en una conferencia a la que acudí, y el objetivo de la misma es priorizar.

Todo lo que hagamos en nuestras vidas debe ser orientado a construir un propósito de vida, dejando a un lado lo que desgasta tu cuerpo o mente, y llevándote hacia donde quieres estar. Para ser exitoso, hay que estar enfocado.

El Rapid Planning Method (RPM), o método de planeación rápida, te permite hacer un análisis de tus prioridades y descubrir de esta forma, hacia dónde deben estar enfocados tus esfuerzos.

En este artículo te explico mejor de qué se trata.

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